La línea LS del bus comunal se amplía a partir del 3 de mayo para cubrir más zonas de la parroquia: llegará hasta el Colegio Sant Ermengol, por un lado, y también subirá hasta la urbanización Comella Park. El objetivo es, según ha detallado el cónsul mayor, David Astrié, ampliar la cifra de usuarios del bus comunal, que ha experimentado un crecimiento continuo desde la implantación de la concesión actual el septiembre del 2019.
Desde la puesta en marcha del sistema actual con billetes a precios simbólicos (0,10€ y gratuito para varios colectivos y todos los poseedores del abono gratuito del bus nacional) se ha consolidado la apuesta por una movilidad sostenible y la disminución del tráfico de vehículos. Así lo ha puesto de relieve el cónsul mayor en una rueda de prensa durante la cual se ha mostrado el primer bus comunal de Andorra la Vieja rotulado con el nombre ‘Clipol’, el histórico nombre del transporte con que los cónsules de las siete parroquias acordaron a final de noviembre rebautizar el servicio.
Durante el 2022, el bus comunal de Andorra la Vieja dio servicio además de 530.000 pasajeros. La mayoría de los trayectos, un 55%, a la línea LV de Ciutat de Valls (293.165 usuarios); seguida de la línea LM de La Margineda (197.581) y LS de los Serrijones (39.421).
Las novedades a la línea de los Serrijones (LS), que se han estudiado de manera cuidadosa antes de implantarse y que son fruto, también, de demandas que nos han hecho llegar los ciudadanos de la parroquia afectan precisamente a la línea con una menor frecuentación, hecho que permite mantener el servicio en horas punta y espaciar de 45 a 60 minutos el paso del bus en horas de menor afluencia. Esto permite también que la ampliación del servicio no comporte ningún coste adicional para el Comú.
Dani Vinseiro, director general de Andbus -empresa de transporte concesionaria del bus comunal-, ha señalado el importante grado de satisfacción de los usuarios con el servicio: las encuestas realizadas le otorgan una nota mediana de 9,2 sobre 10. Vinseiro ha remarcado el diálogo constante y fluido con el Común en la hora de ajustar frecuentaciones de líneas y mantener la eficiencia y satisfacción ciudadana con el servicio.